Como
es bien sabido y según la indicación de la Organización Mundial de la Salud, la
leche materna es el mejor alimento para el lactante y además se recomienda de
forma exclusiva hasta los seis meses de edad.
Sin
embargo, por diversas razones que ya hemos comentado en otros blogs la
lactancia materna no es efectiva o necesita de un reforzamiento por medio de la
variedad de fórmulas infantiles que ofrece el mercado.
Sin
embargo, las formulas infantiles con presentación en polvo no vienen estériles,
por lo que lo más recomendable es prepararla cuando va a ser consumida y la
misma no puede estar por más de una hora a temperatura ambiente por lo que hay que
desechar la cantidad que él bebe no consumió; entonces para evitar la
contaminación no se podría dar la leche poner el sobrante en el refrigerador y
luego ofrecer el sobrante más tarde ya que la leche se contamina.
Las
bacterias que podrían contaminar la leche son las que se encuentran presentes
en el ambiente, los chupones, las manos del preparador o manipulador, el polvo
o los implementos utilizados para la preparación.
La
Organización Mundial de la Salud ha preparado instrucciones específicas en
cuanto a la preparación y manipulación
de las leches infantiles:
OMS, 2007 |
OMS,2007 |
Un
ejemplo importante está dado por un caso de contaminación reciente presentado
en este 2015 donde el polvo se encontraba contaminado: autoridades sanitarias
prohibieron la comercialización de un lote de leche en polvo Sancor Bebé 2 por
estar contaminada con la bacteria Cronobacter sakazakii, la misma presente en
un lote de Sancor Bebé 1 que en abril 2015 estuvo asociado con un brote
infeccioso en una sala de neonatología del hospital Posadas de Argentina en el
que murió una bebe.
OMS,2007 |
OMS, 2007
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