Cuando se es madre,
cuidadora, familiar de un niñ@ y sobre todo por primera vez queremos siempre
que él o ella estén bien pero a veces por desconocimiento se incurre en errores
o practicas inadecuadas.
Sabemos que la leche materna
por recomendación de la OMS es el mejor alimento para el lactante y se debe
ofrecer en forma exclusiva hasta los 6 meses de edad, pero para cuando por
diversas razones se ha escogido la lactancia artificial hay dos formas de presentación
de la misma que te explico a continuación.
Las leches de fórmulas se
obtienen ya sea de origen animal o vegetal y para poder obtenerla en su forma
en polvo lo que se realiza es un proceso mediante el cual se elimina toda el
agua presente y se consigue un polvo que es consumible volviéndolo a mezclar
nuevamente con agua; es un proceso que pareciese no tener sentido pero implica
algunas ventajas.
Por ejemplo, la leche en
polvo dado su consistencia es posible de ser conservada por más tiempo, incluso
la lata de leche en polvo puede llegar a conservarse durante varios meses,
mientras que la liquida su duración es más corta y una vez abierta en su envase
comienza a perder propiedades en tanto en la liquida esto sucederá hasta que el
polvo se mezcle con el agua de preparación.
Por lo general se sabe que
la leche en polvo al separase del agua conserva los nutrientes de mejor manera
como el calcio y las proteínas, pero se debe recordar que se debe seguir la
dosis recomendada por el fabricante paro no generar mayor o menor carga de
nutrientes.
Sin embargo las compañías dedicadas
al mercado de las leches mediante los actuales procesos de altas temperaturas (UHT) y
los nuevos envases disponibles hacen que la leche líquida se conserve mucho
mejor y por ende es más común que se distribuyan los envases ya preparados en
forma liquida; no obstante tiene la limitante de costo que se eleva en cuanto a
las preparaciones listas.
Entonces el mayor beneficio
que le podríamos atribuir a la leche líquida es su exacta dosificación, ya que
se tiene la composición ideal entre líquido y sólido y esto garantiza que el
niñ@ reciba los macro y micronutrientes que necesita, evitando la sobredosis o
incluso subdosificación que puede generar obesidad infantil o desnutrición,
respectivamente.
El mercado ofrece asimismo,
una formula concentrada que se utiliza también con la mezcla de agua según la indicación
del fabricante pero al igual que la leche líquida su costo mayor y al igual que
la leche en polvo debe ser preparada con la dosis correcta.
Otro aspecto que podríamos
considerar es en cuanto a la higiene ya que las fórmulas lácteas liquidas al
venir completamente listas para ser ingeridas, no requiere de manipulación
adicional que si es requerida por las formulas en polvo.
Entonces en la forma
correcta de preparación y dosificación ambas presentaciones lácteas son
nutricionalmente correctas por lo que un adecuado manejo de alimentación del
bebe con una u otra presentación le estará suministrando los nutrientes
necesarios e indispensables para el adecuado crecimiento y desarrollo del niñ@.
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